El impacto de la migraña a nivel laboral

La migraña es una forma específica de dolor de cabeza caracterizada por ataques recurrentes que pueden durar desde horas hasta días. Los síntomas incluyen dolor pulsátil, sensibilidad a la luz y al sonido, náuseas e incluso vómitos. Estos episodios pueden ser tan debilitantes que interfieren con las actividades diarias, incluido el trabajo.

Esta es una condición médica debilitante que afecta a millones de personas en todo el mundo. No solo causa dolor intenso y discapacidad durante los episodios agudos, sino que también puede tener un impacto significativo en la vida laboral de quienes la padecen. 

A medida que comprendemos mejor esta enfermedad, es crucial examinar cómo afecta a la productividad y hoy, nos enfocaremos en el bienestar de los trabajadores, pues los efectos de la migraña en el trabajo son significativos. 

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la migraña se encuentra entre las 20 principales causas de discapacidad en todo el mundo. Los trabajadores que sufren de migraña pueden experimentar una disminución en la productividad debido a ausencias laborales, reducción en la calidad del trabajo y una menor capacidad para concentrarse y tomar decisiones.

Es importante comprender que la migraña sucede con más frecuencia de lo habitual, de hecho, se ha encontrado que los trabajadores con migraña tenían un 50% más de probabilidades de ausentarse del trabajo debido a enfermedad en comparación con aquellos sin migraña.

Varios factores pueden desencadenar o exacerbar los episodios de migraña en el entorno laboral. El estrés, la falta de sueño, la exposición a luces brillantes o parpadeantes, el ruido intenso y los cambios en los patrones de alimentación son solo algunos ejemplos. Cada persona que sufre de migraña puede experimentar la enfermedad de manera diferente, lo que significa que no existe una solución única para abordar sus necesidades en el lugar de trabajo.

Por esta razón, te dejamos 3 consejos para tratar de evitar que la migraña altere tu desempeño laboral: 

• Controla el estrés y planifica las tareas: El estrés puede desencadenar brotes de migraña, por lo que es crucial manejarlo de manera efectiva. Dedica tiempo a planificar tus tareas diarias y establece prioridades. Delega responsabilidades cuando sea posible y no temas pedir ayuda si te sientes abrumado. Organizar tu día de trabajo te ayudará a reducir la ansiedad y minimizará la probabilidad de sufrir un episodio de migraña.
• Mantén una hidratación adecuada: La falta de hidratación puede ser un desencadenante común de la migraña. Asegúrate de beber suficiente agua durante todo el día, especialmente si trabajas en condiciones de calor o al aire libre. Mantén una botella de agua cerca de tu lugar de trabajo y establece recordatorios regulares para beber. La hidratación adecuada no solo es esencial para prevenir los ataques de migraña, sino que también contribuye a tu bienestar general.
• Practica una buena higiene postural: Adoptar una postura adecuada mientras trabajas puede ayudar a prevenir dolores de cabeza y tensiones musculares que pueden desencadenar la migraña. Asegúrate de ajustar tu silla y tu escritorio para mantener una posición ergonómica. Toma descansos breves para estirarte y relajar los músculos regularmente. La atención a la postura y la ergonomía no solo te ayudará a prevenir los dolores de cabeza, sino que también mejorará tu comodidad y productividad en el trabajo.

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